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De muchos atletas suele decirse que el futuro es suyo, pero cuando hablamos de María Vicente el presente atropella un destino marcado para alcanzar las más altas cotas. La catalana de 19 años, que entrena Ramón Cid y vive en San Sebastián, aterrizó en Gallur (Madrid), sede del 57º Campeonato de España Indoor, con el firme propósito de destrozar el récord nacional de pentatlón que logró en Antequera en 2019.
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— atletismoRFEA (@atletismoRFEA) February 19, 2021
📹 Así ha sido el RÉCORD DE ESPAÑA de @mariiaviicentee
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Vicente empezó de forma excepcional. Mejor marca personal en 60 metros vallas: 8,25 por el 8,30 que tenía como mejor registro y el 8,35 que firmó en Antequera hace dos años. Victoria sin paliativos y 1.073 puntos al marcador.
Turno para la altura y el peso, dos de los mayores escollos de la talentosa atleta de Hospitalet... que lo fueron de nuevo. Saltó 1,75, tres centímetros por debajo de su tope hasta ahora, y tuvo un decepcionante concurso de peso con 12,25 como único lanzamiento válido. 80 centímetros menos de lo que lanzó hace una menos de una semana.
La cara de Vicente mostraba decepción, pero los grandes son los que superan estas situaciones. Llegaba el turno de la longitud, su gran arma y ahí no falló. Inicio en 6,21 que dejaba el récord lejos, nulo en el segundo... y 6,49 en el tercero que le reportaban 1.004 puntos y daban la vuelta la tortilla al ponerse 17 puntos por encima del objetivo. "Estaba atacada antes del último salto", reconocía Vicente.
El 800 dictaminaría si caía o no el récord. Necesitaba estar por debajo de 2:26.10, más de cinco segundo por encima de su 2:20.87. Y lo cerró. Mejor marca personal para ella en la prueba al parar el crono en 2:19.51, sumar 830 puntos y completar el pentatlón con 4.501 puntos. Campeona de España con recórd y se pone sexta en el ranking europeo del año.
